Desde la Asamblea Feminista de Zaragoza, convocamos a
una
- concentración
- el
próximo jueves 29 de agosto,
- a las 19:00
horas,
- frente al Hospital
Miguel Servet,
- para reclamar nuestro derecho
a ser madres, independientemente de nuestra
condición.
Ante la
decisión del Gobierno de limitar el acceso a la reproducción
asistida de la Seguridad Social a las mujeres con problemas de
esterilidad, lo que en la práctica dificulta gravemente el acceso de
lesbianas y solteras, pedimos conocer si finalmente se va a llevar a
cabo en nuestra Comunidad esta medida discriminatoria e
inconstitucional.
Creemos que una vez más las decisiones que
toma el ejecutivo, justificadas con el pretexto de la crisis, son
ideológicas. Con ellas se está discriminando bien por la
orientación sexual, o porque los modelos de familia no corresponden
al tradicional.
Por ello, queremos
reivindicar que:
- Las mujeres tenemos
derecho a tomar decisiones sobre nuestra propia maternidad y
cuerpo.
- En la Ley 14/2006, de 26 de mayo, sobre técnicas de
reproducción humana asistida, no se valora ni la orientación sexual
ni la decisión personal de no tener pareja para regular el acceso a
este derecho.
De esta manera, mantener únicamente el criterio de
infertilidad como se pretende ahora, discrimina por razón de
orientación sexual y de estado civil, lo cual vulnera el principio
de igualdad que promulga la Constitución. Además, es una medida
sexista en cuanto que exige que las mujeres tengan un hombre a su
lado para poder ser madres. La exigencia de ser estéril supone, en
la práctica, un veto a toda mujer sin problemas de esterilidad
biológicos pero que no pueda concebir porque carezca de pareja
masculina.
Así
mismo, con esta propuesta el Gobierno no reconoce la diversidad
familiar que ya es un hecho real tanto en el estado español y aquí
en Aragón.
- El derecho a la salud no es solo el derecho a no
tener enfermedades, sino a tener un ambiente saludable, una vida
equilibrada y acorde a nuestras decisiones. Con ello, también
defendemos una sanidad pública y de calidad, ya que estos
tratamientos seguirán realizándose en clínicas privadas, cuyo
coste no es accesible a la mayoría de la población.
- La
Consejería de Sanidad debe pronunciarse de inmediato respecto a la
aplicación en Aragón de esta medida. Varias mujeres han denunciado
que sus tratamientos han quedo suspendidos a la espera de saber qué
va a pasar en la Comunidad, lo que está generando un gran
desconcierto. Andalucía, País Vasco, Canarias ya han mostrado su
rechazo.
Manifiesto de la Asamblea Feminista de Zaragoza